DESCONTANDO DÍAS, SUMANDO KILÓMETROS

Continuamos sumando kilómetros en nuestra etapa de preparación. Nuestra ilusión aumenta al mismo ritmo que el reloj de nuestro blog descuenta días. Estamos recorriendo una media de 70-90 km semanales repartidos en 4-6 días, dependiendo del tiempo que cada uno de nosotros conseguimos robar al trabajo y al resto de nuestras obligaciones. Los más veteranos del grupo son los que más tiempo dedican y quizá sean los que menos lo necesitan, ya que cada vez nos cuesta más trabajo seguirles en las interminables pendientes del Garraf.

Toni Giménez es nuestra última incorporación. Se ha unido a nosotros para compartir esta locura y ya es un miembro más del grupo. Entrena como el que más y progresa incluso más de lo que entrena. Aunque nos hayas “roto” la rima del 5: 5 maratones- 5 días- 5 participantes nos alegramos mucho de compartir este reto contigo y te damos nuestra más cordial bienvenida. Además, mejor así porque ya sabemos que ¡¡¡ el 5 tiene muy mala rima………!!!

Toni Giménez, nuestra última incorporación

Estamos trabajando mucho las cuestas, aunque sabemos que en el Camino de Santiago los desniveles serán mucho menores (a excepción de la siempre temida subida a O Cebreiro). Correr por montaña nos permite endurecer nuestra musculatura y nuestra “mente”, evitando pisar asfalto. Nuestras articulaciones lo agradecen, aunque el final de cada cuesta nos hace añorar los entrenamientos por terreno llano, incluso el duro trabajo de series en la pista.

A estas alturas, hemos recorrido el Parque Natural del Garraf de punta a punta. Creo que no hay torre de comunicaciones, antena, depósito de agua, camino, ermita o castillo que se nos haya resistido, por muy alto que se vea desde la perspectiva del nivel del mar desde donde siempre iniciamos nuestros recorridos. Mucho sudor al menos recompensado con unas magníficas vistas de toda la costa del Baix Llobregat y del Garraf.

Hoy, domingo 13, nos ha tocado hacer una tirada larga de 3 horas 10 minutos aunque a un ritmo algo más lento del habitual. Se trata de acumular horas y kilómetros en nuestras piernas, evitando riesgos de lesiones. Más de uno lleva un poco mal el correr a ritmos lentos, ya que no se disfruta adelantando ciclistas en las pendientes más empinadas. Los domingos los caminos del Garraf están llenos de deportistas ocasionales a lomos de caras bicicletas. No suele fallar. Salvo excepciones, cuánto más cara es la bicicleta más sobrepeso tiene el ciclista que la porta y más fácil resulta adelantarles. Aunque ninguno lo reconozcamos, hay un cierto morbo en adelantar ciclistas treintañeros y ver la cara que se les queda cuando un grupo de veteranos con muchos más años y menos pelo (al menos, algunos) los deja atrás con relativa facilidad. Y es que todos sabemos que hacer deporte solo los domingos sirve para mantener nuestra conciencia en forma pero no nuestro cuerpo.

En definitiva, siete semanas es el saldo que nos queda en nuestra particular cuenta atrás. Todavía quedan por delante muchos kilómetros de preparación pero, siendo positivos, son muchos más los kilómetros que han quedado atrás.